¿Hacer deporte aumenta las defensas? Desmontamos los mitos

Hacer deporte aumenta las defensas, ¿sí o no? En este artículo te revelamos lo que la actividad física moderada puede hacer por tu salud. Además, te contamos qué actividades puedes practicar y, por supuesto, cómo fortalecen el sistema inmunológico, responsable de las defensas del cuerpo.

¿Hacer ejercicio fortalece el sistema inmunológico?

Cuando se trata de la práctica deportiva, muchas personas creen que es la mejor manera para fortalecer los músculos o bajar de peso, sin embargo, no es lo único que el deporte puede hacer por tu cuerpo. En líneas generales, la actividad física moderada contribuye a mejorar la salud de los huesos y articulaciones, así como de los sistemas cardiovascular y respiratorio. ¿Y hacer deporte aumenta las defensas? ¿Mejora también el sistema inmunológico? ¿Cómo lo hace?

Es importante que sepas que hacer ejercicio es uno de los factores indispensables para tener un sistema inmunológico sano, pero no es lo único. Aunque hacer deporte aumenta las defensas, también es necesario seguir una alimentación equilibrada y, por supuesto, no olvides beber suficiente agua y descansar.

¿Qué es el sistema inmunológico?

El sistema inmunológico es el encargado de identificar y combatir a los microorganismos y patógenos externos que penetran el cuerpo. Este sistema es una compleja estructura que incluye células, tejidos y órganos y, por la acción que realiza, se dice que este sistema «son las defensas del cuerpo». ¿Hasta qué punto es cierto?

Hacer deporte aumenta las defensas y mejora el sistema inmunológico

Sí, el sistema inmunológico localiza los virus y bacterias, así como hongos y parásitos que generan enfermedades. Es así como el sistema inmunológico, no solo encuentra estos agentes patógenos, sino que también los combate. Cuidado, pues, como el resto de sistemas del cuerpo, el inmunológico también puede sufrir enfermedades. Este sistema puede verse afectado por los cambios de estación, la contaminación medioambiental, la edad y hasta por llevar una alimentación deficiente.

Hacer deporte aumenta las defensas del organismo

Hay acciones que puedes poner en práctica si quieres mejorar las defensas del organismo: una de ellas es hacer deporte. Además, por supuesto, de seguir una alimentación balanceada y beber suficientes líquidos. También es importante priorizar el descanso, cuidar el consumo de cafeína, reducir los niveles de estrés y alejarse del sedentarismo.

Es aquí cuando el hacer deporte entra en acción. ¡Es una de las mejores medidas a poner en práctica para fortalecer el sistema inmune! Y es que la práctica deportiva habitual contribuye a estimular la producción de leucocitos, haciendo que estos se muevan más rápido. Los leucocitos son los encargados de defender al cuerpo y retirar desechos de los tejidos.

¡Cuidado al entrenar!

Hacer deporte aumenta las defensas sí, pero cuidado con la práctica deportiva. Y es que la intensidad del entrenamiento puede hacer que el ejercicio sea un gran aliado para el sistema inmunológico o todo lo contrario. En función de la intensidad, la duración y la cronicidad del deporte, este puede tener efectos positivos o negativos para el sistema inmunológico.

A corto plazo, practicar ejercicio muy intenso puede tener repercusiones negativas para el sistema inmunológico, cosa que hace que bajen las defensas. ¿Por qué? Porque el entrenamiento intenso contribuye al descenso de los leucocitos o glóbulos blancos, cosa que, a la larga, puede hacer que aparezcan infecciones.

A medio o largo plazo, ocurre lo contrario, el ejercicio puede estimular el aumento de los leucocitos y la actividad de estos. ¡Por eso se dice que hacer deporte aumenta las defensas! Vigila la intensidad del entrenamiento para cuidar tu sistema inmunológico.

¿Cómo mejorar el sistema inmunológico al hacer deporte?

La mejor manera de cuidar al sistema inmunológico a través de la práctica deportiva es haciendo ejercicios específicos. Empezamos por contarte que los ejercicios aeróbicos moderados son los que más beneficios acarrean para las defensas del organismo. Aquí se incluyen, por ejemplo, andar en bicicleta, nadar o correr.

Por otra parte, los ejercicios de fuerza y musculación también son una buena manera de cuidar las defensas del cuerpo. El entrenamiento de fuerza no solo mejora el sistema inmune de manera directa, sino también de forma indirecta, pues contribuye a mantener el metabolismo bajo control. En pocas palabras, hacer deporte aumenta las defensas de la siguiente manera:

  • Los anticuerpos combaten las infecciones.
  • Los glóbulos blancos circulan más rápido y son capaces de detectar problemas con antelación.
  • El esfuerzo que se realiza durante la práctica deportiva, contribuye a eliminar las bacterias de los pulmones.
  • La temperatura corporal aumenta durante la actividad física, esto retrasa el crecimiento de las bacterias.
  • Durante la actividad física, la hormona del estrés se libera de forma lenta. Esto contribuye a reducir la posibilidad de enfermedades.

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